Cuando se acerca el verano, a muchos se les pasa por la cabeza la idea de tener una piscina. Este es tu momento de cumplir ese sueño y crear ese espacio para relajarte y divertirte con tu familia y amigos.
Existen muchos tipos: de obra, prefabricabas, desmontables y muchas más, todas con variedad de modelos ideales para complementar esas reformas que quieras hacer (o no) a tu jardín en verano.
Las piscinas de obra son mucho más versátiles, ya te ofrecen libertad para elegir el tamaño y el diseño que quieras, por eso son de las favoritas de muchos. También puedes decidirte por una enterrada.
De hecho, hay hechas de hormigón armado, poliestireno, fibra de vidrio, paneles de acero. La elección depende ciertamente del presupuesto y cual se adapte mejor al espacio y la estética (esto debes evaluarlo muy bien desde antes de la construcción).
Asimismo, en el mercado existen modelos desmontables y opciones de diseño de obra como de estilo desbordante, de microcemento, de arena o de apariencia natural. Todo depende del estilo que quieras conseguir y de cuánto estés dispuesto a invertir.